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Pero si las jornadas matutinas han transcurrido en las aulas con las actividades académicas, las tardes han sido destinadas para el juego tradicional y la fiesta.

 

Rarajípa (carrera de bola), ariweta (juego del aro), el quinceel chilillo y la lotería, reúnen a los escolares en torno a la cancha y los pasillos de tierra y adoquín para entregarse a un ambiente de esparcimiento y aprendizaje lúdico. 

 

Por la noche, tras la cena, las proyecciones de video y el baile se convierten en el cierre perfecto de la convivencia.

 

Quiénes somos, qué hacemos y dónde vivimos, son los temas de las películas que las delegaciones han preparado para compartir en estas noches de plenilunio serrano.   

  

Juegos tradicionales

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